Microsoft ha ofrecido algunos detalles de cómo será el proceso de actualización a Windows 8.1, que será gratuita para todos los usuarios de Windows 8, y se realizará a través de la tienda de aplicaciones del fabricante.
El próximo 26 de junio es cuando está previsto que se libere una vista previa de Windows 8.1, pero tal vez haya que plantearse si probar o no la nueva entrega, ya que tanto la versión previa como la RTM (Release to Manufacturing), tienen un “pero”: requerirán la actualización de todas las aplicaciones que tengamos en la máquina Windows 8.
Cuando la versión previa esté lista, recibiremos una notificación en la aplicación “Tienda”, la actualización será optativa. Igual ocurrirá cuando esté disponible la versión RTM (se espera para finales de año), donde nuevamente podremos decidir si actualizar o no.
En ambos casos, si aceptamos la actuialización, deberemos reinstalar todos los programas que tengamos, tanto los que operan bajo la interfaz Modern UI, como las que funcionan en el escritorio tradicional. Los usurios de Windows RT corren la misma suerte. En definitiva, si queremos probar cada una de las versiones previas, en cada caso habrá que reinstalar todas las aplicaciones, aunque los datos y las cuentas se preservarán.
En el caso de la versión definitiva de Windows 8.1 esto no ocurrirá, actualizándose únicamente el sistema, conservando las aplicaciones instaladas, así como datos y cuentas. El por qué de esta decisión de Microsoft puede estar debajo de garantizar la estabilidad. Ya sabemos que una máquina plagada de programas lo es también de posibles problemas.
Vía | ZDNet En Genbeta | Así es Windows 8.1 en acción y así será la instalación de la preview
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