Luego de haber alcanzado los 110 millones de instalaciones para el 6 de octubre, Windows 10 habría sumado otros 10 millones durante las últimas 3 semanas, para así alcanzar a estar instalado en 120 millones de PCs, según datos filtrados por parte de empleados de Redmond al blog Winbeta.
¿Como deja esto a Windows 10 respecto a su meta de 1.000 millones de instalaciones? Bien en general, pero con algunas señales de preocupación. Considerando el _total_ de instalaciones hasta ahora, la adopción de Windows 10 va a buen ritmo, si consideramos que han transcurrido solo 3 meses desde su lanzamiento.
Pero si nos fijamos en el ritmo de instalaciones mensuales y diarias, vemos que este ha ido en descenso, y que si se mantuviera el ritmo actual, Microsoft no podría alcanzar su meta de 1.000 millones de dispositivos con Windows 10 para el 2018, aun si sumamos las consolas Xbox One y los teléfonos que se actualizarán a Windows 10 Mobile.
Si Microsoft aspira a alcanzar esta meta (algo que es vital para reposicionar a Windows como un ecosistema atractivo para los desarrolladores), entonces Windows 10 debería estar ganando terreno a un ritmo de 900.000 - 1.000.000 de instalaciones diarias. Sin embargo, durante los últimos meses dicho crecimiento ha bajado hasta las 667.000 actualizaciones diarias.
Esto no quiere decir, bajo ningún punto de vista, que Windows 10 esté fracasando o algo parecido. Su nivel de adopción ha sido excelente, sobre todo si consideramos la recesión en la que se encuentra el mercado del PC. Pero de momento eso _no ha sido suficiente_ para alcanzar la meta auto-impuesta por Microsoft, por lo que en Redmond necesitan poner el pie en el acelerador en lugar de dormirse en los laureles.
Algunas cosas que pueden ayudar a recuperar _momentum_ en los próximos meses son la actualización de noviembre, que resolverá muchos errores que disuaden a los usuarios de instalar Windows 10, y también la llegada de la temporada de ventas navideñas de PCs, en la que los equipos ya deberían venir con Windows 10 preinstalado.
Además, en los años siguientes deberían sumarse las actualizaciones de PCs corporativos, que siempre tardan un poco más en dar el salto a la última versión de Windows.
_(Nota: el segundo gráfico está construido bajo el supuesto de que para 2018 habrá una base instalada de 50 millones de consolas Xbox One con Windows 10, y 100 millones de móviles con Windows 10 Mobile, por lo que las instalaciones de PCs y tablets tendrían que aportar los otros 850 millones.)._
Vía | Winbeta
Ver 12 comentarios