Si te gusta mantener tu equipo actualizado, puede que en alguna ocasión te hayas llevado una sorpresa al intentar ejecutar una aplicación antigua. Desarrollos que antes funcionaban en versiones de Windows y que ahora, al intentar ejecutar, sólo llegan a mostrar un aviso alertando que no se puede ejecutar esta aplicación en el equipo.
Que no cunda el pánico. Se trata de aplicaciones y juegos que han quedado desfasados y que no son ejecutables de la manera tradicional en Windows 10. Esto no quiere decir, sin embargo, que no se puedan arrancar. Y es que para eso tenemos el "Asistente de compatibilidad".
El Asistente de compatibilidad es tu aliado
Gracias al "Asistente de compatibilidad" podemos ejecutar esos juegos míticos que llegaron en la época de Windows 95 o Windows XP... Y para ello, sólo vamos a tener que ejecutar unos pocos pasos.
Usar el "Asistente de compatibilidad" es muy sencillo. Es un modo, como su nombre indica, que lo que permite es simular que nuestro PC usa una versión del sistema operativo anterior a la que realmente usa. Se trata de cambiar algunos parámetros al abrir una aplicación concreta para que funcione sin problemas o al menos para intentarlo.
Para hacer uso del "Asistente de compatibilidad" debes hacer click en el acceso directo de la aplicación y pulsar en "Propiedades", algo que también puedes hacer desde el "Explorador de archivos", pulsando con el botón derecho del ratón o el trackpad en el archivo ejecutable que abre la aplicación y eligiendo "Propiedades".
Entre las opciones que aparecen, nos fijamos en una llamada "Compatibilidad". debemos decidir qué tipo de compatibilidad deseamos activar. Se trata de hacer que Windows simule ser otra versión más antigua, para engañar a aplicaciones que comprueban qué versión de Windows estás usando. En este sentido, nos encontramos con la posibilidad de "Ejecutar este programa en modo de compatibilidad para" con la versión de Windows que quieres simular, que va desde Windows Vista a Windows 8.
Además, el "Asistente de compatibilidad" ofrece otros ajustes para ayudar a hacer funcionar aplicaciones y juegos antiguos, aunque la disponibilidad de estos cambia (algunos quedan en gris y no se pueden activar) según la aplicación que vamos a usar:
- Modo de color reducido: para maximizar la compatibilidad con aplicaciones antiguas, este modo usa menos colores.
- Ejecutar con una resolución de pantalla de 640 x 480: cambia la resolución de la pantalla a 640 x 480 píxeles, una resolución habitual en los equipos de hace años.
- Deshabilitar optimizaciones de pantalla completa: corrige errores y problemas con aplicaciones y juegos que funcionan a pantalla completa.
- Ejecutar programa como administrador: otorga más permisos a la aplicación, algo que puede solucionar problemas en apps antiguas.
- Registrar este programa para el reinicio: la aplicación se volverá a abrir automáticamente después de reiniciar
- Cambiar configuración elevada de PPP: es útil para corregir problemas visuales ya que permite cambiar la configuración de PPP para esta aplicación.