No obstante llevar casi un año entre nosotros y haber lanzado toda clase de novedades y mejoras, lo cierto es que, hasta hoy, todavía desconocíamos los planes de los de Redmond respecto a las actualizaciones de Windows 10.
Un enigma que ha quedado resuelto en el marco del WinHec, cuando Chris Riggs, Senior Program Manager de Microsoft ha aportado un poco de luz sobre la cuestión y ha informado de los planes que tiene su compañía para este OS como servicio –dentro de su nuevo enfoque Windows as a service (WAS)-.
Los detalles
En concreto, Riggs ha asegurado que la frecuencia de actualizaciones menores será mensual, unos remozados cuyo objetivo principal residirá no solo en corregir los errores que vayan detectándose, sino también en mejorar el sistema en términos generales.
Respecto a los grandes cambios, tendrán lugar cada seis meses, unas modificaciones que incluirán novedades, estrenarán funciones y otras alteraciones significativas. De hecho, la entidad ha llegado a diferenciarlas en Quality Updates (las acumulativas) y Feature Updates respectivamente. Unos nombres que lo dicen todo.
Asimismo, las actualizaciones llegarán primero para los usuarios de consumo y, seguidamente, a los de la versión profesional y versiones educativas. Tendrán un plazo máximo para ponerla en marcha de 4 meses, un tiempo que la multinacional ha establecido con el objetivo de evitar que haya demasiadas diferencias entre las distintas versiones de su OS.
Vía | Windows Blog Italia
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