San Francisco, Howard Street, edificio norte del Moscone Center, un inmenso cartel con los logos de Microsoft y Build corona la entrada. En la puerta, una figura con la palabra '//build/' señala el camino y dirige a los asistentes. Por si alguno aún no se había dado cuenta, los de Redmond están a punto de celebrar aquí su evento más destacado del año: la conferencia para desarrolladores Build 2013.
Una vez dentro nos encontramos con un inmenso hall que en cuestión de horas recibirá a una avalancha de desarrolladores y medios de comunicación de todo el mundo. Todos ellos tienen por delante tres intensos días de presentaciones y conferencias que colocarán al "downtown" de San Francisco en el centro de atención del universo Windows.
La ciudad californiana no es territorio virgen para Microsoft. El Moscone Center ya vivió algunas de las PDC más importantes de los años 90, como la de 1992, que anunciaba la llegada inminente de Windows 95, o la PDC de 1996, muestra viviente del dominio de Microsoft durante la década. Tras un tiempo lejos de la ciudad del Golden Gate, los de Redmond han decidido regresar a un centro de convenciones mítico donde los haya en lo que se refiere a presentaciones tecnológicas.
Esta vez, salvo sorpresa mayúscula, parece que el protagonismo se lo llevará Windows 8.1, la esperada actualización de Windows 8. Eso sí, no se trata de una actualización cualquiera. Basta ver la importancia que Microsoft le ha dado y los meses de rumores sobre su contenido para darse cuenta de que estamos ante un nuevo paso en la historia del sistema operativo. Y es que, más que nunca, este año Build se escribe con B de Blue.
Pero Windows 8.1 no es ni mucho menos lo único a conocer en estos días. En Build están presentes todos los productos y servicios de Microsoft, con sesiones prácticamente sobre cada uno de ellos: Windows Phone, Windows Azure, Kinect para Windows, etc. No faltan a la cita socios tradicionales de Microsoft, como algunos de los OEMs más relevantes que también contarán con presencia en el evento: Acer, Lenovo, HP, Dell, e incluso Nokia en el apartado de Windows Phone.
Pero por encima de presentaciones mediáticas y expositores publicitarios, Build sigue siendo un evento para desarrolladores, y a ellos van dedicadas el 90% de las sesiones. Desde nuevas herramientas hasta charlas convertidas en auténticos tutoriales, pasando por demostraciones del desarrollo de algunas aplicaciones, las cuales esperamos ver pronto en nuestros Windows y Windows Phone. Eso sin olvidar el tradicional Hackathon, donde el objetivo es desarrollar la mejor aplicación posible en los tres días que dura el evento.
Son las doce de la noche en San Francisco. Los periodistas y desarrolladores que inundan los hoteles del centro de la ciudad se irán pronto a dormir, si es que no lo hacen ya. Para algunos de nosotros el viaje ha sido largo y toca reponer fuerzas antes de lo que está por venir. En nueve horas dará comienzo la conferencia inaugural. Permaneced a la espera.